Hervir los chiles en un litro de agua y quitar semillas y venas. Reservar el agua.

En un sartén, tatemar la cebolla y el ajo.

Licuar la cebolla, ajo y chiles hasta tener una consistencia tersa.

Cocinar en una cacerola con la mitad de la manteca y agregar la pechuga de guajolote deshebrada.

Hidratar la masa de maíz con el caldo de cocción de los chiles e incorporar el polvo para hornear, sal y la mitad de la manteca. Integrar hasta lograr una masa homogénea y dejar reposar a temperatura ambiente por dos horas.

Forrar el refractario con hoja de plátano, poniendo mecates de modo que pueda amarrarse.

Poner un poco de la mezcla de carne cubriendo la hoja de plátano, cubrir con masa y hacer capas alternándolos. La última capa debe de ser masa.

Envolver completamente el tamal y amarrarlo con unos mecates para que tome forma.

Hornear a 200°C por dos horas o hasta que al introducir un palillo, salga limpio.